Groenlandia
Resulta difícil encontrar en todo el planeta lugares que se conserven tan poco manipulados por el hombre como Groenlandia. Que en un 80% esté cubierta de hielo, su difícil orografía, y su clima inhóspito, han hecho que a lo largo de la historia hayan sido pocos los pueblos que se han asentado en este lugar.El contacto directo con una naturaleza virgen y mínimamente alterada por el hombre, permite al viajero disfrutar de sensaciones únicas.
Navegar por sus fiordos entre icebergs de formas imposibles, presenciar el espectáculo de los seracs desprendiéndose de lenguas glaciares, escuchar el estruendo de los mismos rompiendo un silencio infinito, realizar caminatas desde valles a las cimas de las montañas que recompensan con impresionantes vistas del Inlandis, la sensación que produce saber que nada ni nadie, excepto naturaleza virgen, existe en kilómetros a tu alrededor...
Sin duda este contacto con la naturaleza requiere del sacrificio de prescindir de comodidades, que unido al clima pueden ser los principales inconvenientes. Sin embargo, a pesar de su clima polar, en algunas zonas costeras se pueden dar temperaturas bastante benignas durante el verano. Permitiendo disfrutar de días largos y soleados con temperaturas de entre 10 y 15 grados durante el día y mínimas de cero a cinco grados por las noches.
Es un lugar único y muy recomendable para el viajero que disfruta de la aventura y la naturaleza.